Nikon, con la D90, ha puesto el listón de las reflex para aficionados a un nivel de semi-profesional. Es una extraordinaria cámara con un sensor de 12 megapíxeles, compartido con la D300, que incluye Live View y una pionera en lo que a vídeo en reflex se refiere. Robusta y bien construida, es una máquina precisa en sus mediciones con grandes resultados en color y detalle. Entre sus virtudes cabe destacar su control de ruido en valores ISO altos y los 4,5 fotogramas por segundo. Todo esto se puede conseguir a un precio de unos 850€ en el que la relación calidad/precio es buena, aunque como todo en internet hay que saber buscar y encontrar más barato.
La supuesta frialdad de Nikon al captar los colores es historia y la D90 es prueba de ello. El objetivo del kit 18-105mm permite hacer fotos macro interesantes y en los detalles es en algo en lo que destaca con un enfoque preciso y rápido. Otro campo donde la D90 se desenvuelve a las mil maravillas es son los tonos y la definición que son de primer nivel. Esta cámara tampoco se queda corta cuando tiene que trabajar con ISOS muy altos ya que lo hace muy bien con un ruido razonable.
Comentarios